Aquí descubrirás el secreto para prolongar la vida útil de tu auto, que consiste en el MANTENIMIENTO PROGRAMADO, una serie de inspecciones, ajustes y reemplazos recomendados por el fabricante del automóvil, que se deben realizar en intervalos regulares. Al seguir el programa de mantenimiento recomendado, puedes evitar problemas mayores en el futuro y asegurarte de que tu vehículo esté en óptimas condiciones.

¿Qué incluye el mantenimiento programado?

Generalmente incluye cambios de aceite filtros, neumáticos, frenos, líquidos y otros servicios de inspección y ajuste, mejorando el rendimiento, eficiencia y fiabilidad, así como la prevención de problemas mayores en el futuro.  Siguiendo el programa de mantenimiento recomendado, puedes evitar costosas reparaciones y reemplazos y tener la tranquilidad de que tu vehículo está en su mejor estado para cualquier desafío en la carretera.

¡Aumenta tu seguridad mientras estás al volante!

Los componentes importantes, como las luces, los frenos y los neumáticos, pueden inspeccionarse y repararse durante el mantenimiento programado, lo que reduce la probabilidad de problemas mientras se conduce. Por ejemplo, cambiar los filtros de aire y de combustible regularmente puede mejorar la eficiencia del motor y reducir el consumo de combustible.

Cuando se someten los vehículos a revisiones programadas, en lugar de tener que ser reparados después de una falla mecánica, se reducen los tiempos de inactividad. De esta manera, los vehículos pasan más tiempo en la carretera y menos tiempo en el taller, lo que es esencial para mantener la eficiencia de tu auto.

El mantenimiento preventivo programado ofrece una ventaja evidente: la reducción significativa del consumo de combustible de los vehículos.

El cambio regular de aceite, el mantenimiento adecuado de la presión de los neumáticos y el reemplazo de filtros de aire son solo algunas de las tareas básicas realizadas en el mantenimiento preventivo, que ayudan a disminuir los costos de combustible. Un programa de mantenimiento preventivo bien estructurado para la flota de vehículos permite ahorrar combustible al mantener cada unidad en su nivel óptimo de eficiencia en términos de consumo.